El faro del fin del mundo en Cabo da Roca

faro del fin del mundo

Según la leyenda, hace miles de años los hielos glaciales cubrían incluso la región portuguesa y entonces los osos polares transitaban por esta región.

Pero cuando comenzaron los deshielos, los dioses ordenaron que todos evacuaran el lugar: la única que no obedeció fue una osa polar junto a sus crías. Como castigo, los dioses la convirtieron en una gran roca al igual que a sus crías, y eso es lo que se logra ver hoy cuando se visita la Pedra da Ursa.

Esta es una de las tantas historias que recorren el mito de Cabo da Roca, un mirador de la costa portuguesa ubicado frente al Océano Atlántico y situado a 40 kilómetros de Lisboa y unos 18 kilómetros de Sintra.

Según los especialistas, este lugar está situado en las coordenadas 38º47′ latitud norte y 9º30′ longitud oeste, y por su ubicación geográfica se lo conoce como el territorio del fin del mundo. Es que en el pasado se creía que no había nada más allende los mares.

Cabo da Roca aprovecha un paisaje maravilloso. A su altura, se hunde abruptamente la Sierra de Sintra generando un salto de 140 metros. Se trata de un lugar elegido por varios aspectos: por empezar, brinda las condiciones para que varias especies vegetales crezcan sin problemas, como así también diferentes clases de aves que llegan hasta esta costa para anidar y preparar a su cría. Por supuesto, la presencia humana se da con miles de turistas que eligen estas playas para descansar gracias a la tranquilidad que se vive allí.

Como decíamos, Cabo da Roca da cierto marco también para los enamorados. Según una placa instalada especialmente, ese es el punto que más sobresale al oeste en toda Europa, lo que la convierte en lugar con cierta magia debido a su característica de “fin del mundo”. Incluso quienes así lo deseen, pueden dirigirse a una tienda y comprar un certificado que deja sentado que uno estuvo en ese lugar.

Otro de los elementos que sirven para aumentar el mito sobre esta tierra es la presencia de un faro de 22 metros de altura, que fue el tercero de su estilo que se instaló en la costa de Portugal. Si bien en la actualidad sigue funcionando, el mismo data de 1772 cuando se lo utilizó por primera vez. Con su luz se asegura la señalización marítima entre Cabo da Roca y Ericeira.

Foto vía: Travel in portugal



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