El elevador de Santa Justa, mágico hierro forjado

Elevador de Santa Justa

Gracias a que el centro histórico de Lisboa se construyó sobre siete colinas, es común encontrar calles agostas y demasiado empinadas que comunican a los diferentes barrios de estos sectores, de hecho la ciudad cuenta con otros medios de transporte que fueron de gran ayuda en décadas anteriores para solventar el traslado de las partes bajas hacia las zonas altas.

Uno de estos ejemplos es el Elevador de Santa Justa, cerca de la calle Do Orou, el cual es todo un paradigma urbano y que en la actualidad solo cumple funciones turísticas. En el año 2002 fue declarado Monumento Nacional.

Esta estructura de hierro forjado, la cual guarda grandes semejanzas con la Torre Eiffel de Paris, fue inaugurada en el año de 1902 con el nombre de Elevador do Carmo. Y este parecido con el emblema francés no es casualidad, ya que quien la diseñó fue el arquitecto francés  Raoul de Mesnier du Ponsard, aprendiz aventajado de Gustave Eiffel. Tenía como objetivo comunicar los barrios de la Baixa Pombalina y el Barrio Alto. Cuenta con 45 metros de altura que permiten disfrutar de las mejores vistas de la ciudad.

El elevador de Santa Justa es el único elevador público vertical de la ciudad; los otros elevadores poseen más características de tranvías que se deslizan por las pendientes, como el Elevador da Lavra o el Elevador da Gloria, ambos diseñados por el mismo du Ponsard.

En sus comienzos, este elevador fue impulsado con vapor, pero cinco años más tarde se pasó a energía eléctrica. La parte superior de la torre de estilo Neo-gótico, a la cual se accede mediante una escalera de caracol. En el interior cuenta con una cafetería donde se puede disfrutar de los hermosos paisajes de la ciudad, como el Castillo de San Jorge, las ruinas del convento do Carmo , Plaza del Rossio y el río Tajo.

El elevador realiza una subida cada cinco minutos, anteriormente transportaba 24 pasajeros por viaje, pero en la actualidad solo admite 20 para la subida y 15 para la bajada, por lo que hay que esperar un buen rato para poderlo utilizar,  la gente esperando turno no es poca.

Foto Vía Shoestring



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